21 diciembre 2005

Manifiesto (hablo por mi diferencia)

No soy Passolini pidiendo explicaciones
No soy Ginsberg expulsado de Cuba
No soy un marica disfrazado de poeta
No necesito disfraz
Aquí está mi cara
Hablo por mi diferencia
Defiendo lo que soy
Y no soy tan raro
Me apesta la injusticia
Y sospecho de esta cueca democrática
Pero no me hable del proletariado
Porque ser pobre y maricón es peor
Hay que ser ácido para soportarlo
Es darle un rodeo a los machitos de la esquina
Es un padre que te odia
Porque al hijo se le dobla la patita
Es tener una madre de manos tajeadas por el cloro
Envejecidas de limpieza
Acunándote de enfermo
Por malas costumbres
Por mala suerte
Como la dictadura
Peor que la dictadura
Porque la dictadura pasa
Y viene la democracia
Y detrasito el socialismo
¿Y entonces?
¿Qué harán con nosotros compañero?
¿Nos amarrarán de las trenzas en fardos
con destino a un sidario cubano?
Nos meterán en algún tren de ninguna parte
Como el barco del General Ibañez
Donde aprendimos a nadar
Pero ninguno llegó a la costa
Por eso Valparaíso apagó sus luces rojas
Por eso las casas de caramba
Le brindaron una lágrima negra
A los colizas comidos por las jaibas
Ese año que la Comisión de Derechos Humanos
no recuerda
Por eso compañero le pregunto
¿Existe aún el tren siberiano
de la propaganda reaccionaria?
Ese tren que pasa por sus pupilas
Cuando mi voz se pone demasiado dulce
¿Y usted?
¿Qué hará con ese recuerdo de niños
Pajeandonos y otras cosas
En las vacaciones de Cartagena?
¿El futuro será en blanco y negro?
¿El tiempo en noche y día laboral
sin ambigüedades?
¿No habrá un maricón en alguna esquina
desequilibrando el futuro de su hombre nuevo?
¿Van a dejarnos bordar de pájaros
las banderas de la patria libre?
El fusil se lo dejo a usted
Que tiene la sangre fría
Y no es miedo
El miedo se me fue pasando
De atajar cuchillos
En los sótanos sexuales donde anduve
Y no se sienta agredido
Si le hablo de estas cosas
Y le miro el bulto
No soy hipócrita
¿Acaso las tetas de una mujer
no lo hacen bajar la vista?
¿No cree usted
que solos en la sierra
algo se nos iba a ocurrir?
Aunque después me odie
Por corromper su moral revolucionaria
¿Tiene miedo que se homosexualice la vida?
Y no hablo de meterlo y sacarlo
Y sacarlo y meterlo solamente
Hablo de ternura compañero
Usted no sabe
Cómo cuesta encontrar el amor
En estas condiciones
Usted no sabe
Qué es cargar con esta lepra
La gente guarda las distancias
La gente comprende y dice :
Es marica pero escribe bien
Es marica pero es buen amigo
Super-buena onda
Yo no soy buena onda
Yo acepto al mundo
Sin pedirle esa buena onda
Pero igual se ríen
Tengo cicatrices de risas en la espalda
Usted cree que pienso con el poto
Y que al primer parrilazo de la CNI
lo iba a soltar todo
No sabe que la hombría
Nunca la aprendí en los cuarteles
Mi hombría me la enseñó la noche
Detrás de un poste
Esa hombría de la que usted se jacta
Se la metieron en el regimiento
Un milico asesino
De esos que aún están en el poder
Mi hombría no la recibí del partido
Porque me rechazaron con risitas
Muchas veces
Mi hombría la aprendí participando
En la dura de esos años
Y se rieron de mi voz amariconada
Gritando: Y va a caer, y va a caer
Y aunque usted grita como hombre
No ha conseguido que se vaya
Mi hombría fue la mordaza
No fue ir al estadio
Y agarrarme a combos por el Colo Colo
El fútbol es otra homosexualidad tapada
Como el box, la política y el vino
Mi hombría fue morderme las burlas
Comer rabia para no matar a todo el mundo
Mi hombría es aceptarme diferente
Ser cobarde es mucho más duro
Yo no pongo la otra mejilla
Pongo el culo compañero
Y esa es mi venganza
Mi hombría espera paciente
Que los machos se hagan viejos
Porque a esta altura del partido
La izquierda tranza su culo lacio
En el parlamento
Mi hombría fue difícil
Por eso a este tren no me subo
Sin saber dónde va
Yo no voy a cambiar por el marxismo
Que me rechazó tantas veces
No necesito cambiar
Soy más subversivo que usted
No voy a cambiar solamente
Porque los pobres y los ricos
A otro perro con ese hueso
Tampoco porque el capitalismo es injusto
En Nueva York los maricas se besan en la calle
Pero esa parte se la dejo a usted
Que tanto le interesa
Que la revolución no se pudra del todo
A usted le doy este mensaje
Y no es por mí
Yo estoy viejo
Y su utopía es para las generaciones futuras
Hay tantos niños que van a nacer
Con una alita rota
Y yo quiero que vuelen compañero
Que su revolución
les dé un pedazo de cielo rojo
Para que puedan volar.
Pedro Lemebel (leído en septiembre de 1986 en un Acto de la izquierda en Santiago de Chile)

20 diciembre 2005

Garúa

¡Qué noche llena de hastío y de frío!
El viento trae un extraño lamento.
¡Parece un pozo de sombras la noche
y yo en las sombras camino muy lento!
Mientras tanto la garúa
se acentúa
con sus púas
en mi corazón...

En esta noche tan fría y tan mía
pensando siempre en lo mismo me abismo
y por más que quiera odiarla,
desecharla
y olvidarla
la recuerdo más.

¡Garúa!
Solo y triste por la acera
va este corazón transido
con tristeza de tapera.
Sintiendo tu hielo,
porque aquella, con su olvido,
hoy le ha abierto una gotera.
¡Perdido!
Como un duende que en la sombra
más la busca y más la nombra...
Garúa... tristeza...
¡Hasta el cielo se ha puesto a llorar!

¡Qué noche llena de hastío y de frío!
Hasta el botón se piantó de la esquina.
Sobre la calle, la hilera de focos
lustra el asfalto con luz mortecina.
Y yo voy, como un descarte,
siempre solo,
siempre aparte,
esperándote.

Las gotas caen en el charco de mi alma

hasta los huesos calados y helados
y humillando este tormento
todavía pasa el viento
empujándome.
Enrique Cadícamo (versión del Polaco Goyeneche)

13 diciembre 2005

5

Para que tú me oigas
mis palabras
se adelgazan a veces
como las huellas de las gaviotas en las playas.

Collar, cascabel ebrio

para tus manos suaves como las uvas.
Y las miro lejanas mis palabras.

Más que mías son tuyas.
Van trepando en mi viejo dolor como yedras.

Ellas trepan así por las paredes húmedas.
Eres tú la culpable de este juego sangriento.

Ellas están huyendo de mi guarida oscura.
Todo lo llenas tú, todo lo llenas.

Antes que tú poblaron la soledad que ocupas,
y están acostumbradas más que tú a mi tristeza.

Ahora quiero que digan lo que quiero decirte
para que tú las oigas como quiero que me oigas.

El viento de la angustia aún las suele arrastrar.
Huracanes de sueños aún a veces las tumban.
Escuchan otras voces en mi voz dolorida.

Llanto de viejas bocas, sangre de viejas súplicas.
Ámame, compañera. No me abandones. Sígueme.
Sígueme, compañera, en esa ola de angustia.

Pero se van tiñendo con tu amor mis palabras
Todo lo ocupas tú, todo lo ocupas.

Voy haciendo de todas un collar infinito
para tus blancas manos, suaves como las uvas.

Pablo Neruda Veinte poemas de amor y una canción desesperada

06 diciembre 2005

Cómo escribir un cuento x Bolaño

"Como ya tengo 44 años, voy a dar algunos consejos sobre el arte de escribir cuentos.

1) Nunca abordes los cuentos de uno en uno, honestamente, uno puede estar escribiendo el mismo cuento hasta el día de su muerte.
2) Lo mejor es escribir los cuentos de tres en tres, o de cinco en cinco. Si te ves con energía suficiente, escríbelos de nueve en nueve o de quince en quince.
3) Cuidado: la tentación de escribirlos de dos en dos es tan peligrosa como dedicarse a escribirlos de uno en uno, pero lleva en su interior el mismo juego sucio y pegajoso de los espejos amantes.
4) Hay que leer a Quiroga, hay que leer a Felisberto Hernández y hay que leer a Borges. Hay que leer a Rulfo, a Monterroso, a García Márquez. Un cuentista que tenga un poco de aprecio por su obra no leerá jamás a Cela ni a Umbral. Sí que leerá a Cortázar y a Bioy Casares, pero en modo alguno a Cela y a Umbral.
5) Lo repito una vez más por si no ha quedado claro: a Cela y a Umbral, ni en pintura.
6) Un cuentista debe ser valiente. Es triste reconocerlo, pero es así.
7) Los cuentistas suelen jactarse de haber leído a Petrus Borel. De hecho, es notorio que muchos cuentistas intentan imitar a Petrus Borel. Gran error: ¡Deberían imitar a Petrus Borel en el vestir! ¡Pero la verdad es que de Petrus Borel apenas saben nada! ¡Ni de Gautier, ni de Nerval!
8) Bueno: lleguemos a un acuerdo. Lean a Petrus Borel, vístanse como Petrus Borel, pero lean también a Jules Renard y a Marcel Schwob, sobre todo lean a Marcel Schwob y de éste pasen a Alfonso Reyes y de ahí a Borges.
9) La verdad es que con Edgar Allan Poe todos tendríamos de sobra.
10) Piensen en el punto número nueve. Uno debe pensar en el nueve. De ser posible: de rodillas.
11) Libros y autores altamente recomendables: De lo sublime, del Seudo Longino; los sonetos del desdichado y valiente Philip Sidney, cuya biografía escribió Lord Brooke; La antología de Spoon River, de Edgar Lee Masters; Suicidios ejemplares, de Enrique Vila-Matas.
12) Lean estos libros y lean también a Chéjov y a Raymond Carver, uno de los dos es el mejor cuentista que ha dado este siglo."

Roberto Bolaño "Consejos sobre el arte de escribir cuentos"

05 diciembre 2005

San Martín x Sarmiento

"No lejos de la margen del Sena vive olvidado don José de San Martín [...] ¡Tanta gloria y tanto olvido! ¡Tan grandes hechos y silencio tan profundo! [...] Sus ojos pequeños y nublados ya por la vejez, se han abierto un momento, y mostrádome aquellos ojos dominantes, luminosos de que hablan todos los que le conocieron; su espalda encorvada por los años se había enderezado; avanzando el pecho, rígido como los de los soldados de línea de aquel tiempo, su cabeza se había echado hacia atrás, sus hombros bajádose por la dilatación del cuello, y sus movimientos rápidos, decisivos, semejaban al del brioso corcel que sacude su ensortijada crin, tasca el freno y estropea la tierra. Entonces la reducida habitación en que estábamos se había dilatado, convirtiéndose en país, en nación; los españoles estaban allá; el cuartel general aquí; tal ciudad acullá; tal hacienda, testigo de una escena, mostraba sus galpones, sus caserías y arboledas en derredor de nosotros...
¡Ilusión! Un momento después, toda aquella fantasmagoría había desaparecido; San Martín era hombre y viejo, con debilidades terrenales, con enfermedades de espíritu adquiridas en la vejez; habíamos vuelto a la época presente y nombrado a Rosas y su sistema. Aquella inteligencia tan clara en otro tiempo, declina ahora; aquellos ojos tan penetrantes que de una mirada forjaban una página de la historia, estaban ahora turbios, y allá en la lejanda tierra veían fantasmas de extranjeros, y todas sus ideas se confundían, los españoles y las potencias europeas, la patria, aquella patria antigua, y Rosas, la independencia y la restauración de la colonia; y así fascinado, la estatua de piedra del antiguo héroe de la independencia, parecía enderezarse sobre su sarcófago para defender la América amenazada."
Domingo F. Sarmiento Viajes por Europa, África y América (1845-1848)

27 noviembre 2005

Hechos que no deben olvidarse

Principios que debe seguir todo "poeta de la revolución":
"1) Imponte la tarea de escribir los poemas que jamás se hayan escrito. 2) Llena de palabras el sentimiento. Y llena de intensidad las palabras 3) Los poemas deben tener el olor del mundo y deben respirar como un ser vivo, un poema integral es siempre un operativo cultural. 4) Es necesario escribir el color azul, escribir la angustia, escribir la lucha, escribir el rectángulo, la violencia. 5) Nada reemplazará tu obra. Y nadie te reemplazará a ti. 6) Desprecia convenientemente todo lo antihistórico y escupe a la rigidez y a lo insulso. 7) Eres todo lo que supones y aun eres mucho más. 8) Ámate como amas a la audacia 9) Di la primera palabra. Y no te preocupes por la última. 10) No tienes el “no me toca” para nada. 11) Nunca serás demasiado joven para todo lo que se puede lograr. 12) Tu condición, tu edad, tu circunstancia no es una disculpa para nada. 13) Piensa como dos. Ama como tres. Y trabaja como cuatro. 14) Sé audaz pero mantente fiel a tu respiración. 15) Es posible lograr lo imposible. Hay el 100% de posibilidades. 16) Edita por lo menos una revista de poesía joven en tu vida. 17) Ten el coraje de ir a la mierda y ten el valor de regresar. 18) Si no hay un hombro donde apoyarse, apóyate en tu hombro. 19) El poema no quiere que lo saquen, el poema busca salir. 20) El que camina va en un solo pie. El problema es dónde poner el otro. El que se detiene pone los dos pies y no es fiel a su respiración. 21) Eres indispensable como el aire. 22) Pon en dos minutos de palabras, los hechos de dos años de experiencia. 23) Evádete de tu nombre. 24) Tú siempre serás lo que se necesita.25) Nunca se te va a terminar el amor. Prodígalo en tu mujer y bendícela, prodígalo en tu amigo y bendícelo. 26) Regálate y atrévete. Tu puedes. POESÍA ES. "
Juan Ramírez Ruiz "Poesía integral" - Manifiesto Hora Zero

26 noviembre 2005

Nocturno

Frescor de los vidrios al apoyar la frente en la ventana. Luces trasnochadas que al apagarse nos dejan todavía más solos. Telaraña que los alambres tejen sobre las azoteas. Trote hueco de los jamelgos que pasan y nos emocionan sin razón.

¿A qué nos hace recordar el aullido de los gatos en celo, y cuál será la intención de los papeles que se arrastran en los patios vacíos?

Hora en que los muebles viejos aprovechan para sacarse las mentiras, y en que las cañerías tienen gritos estrangulados, como si se asfixiaran dentro de las paredes.

A veces se piensa, al dar vuelta la llave de la electricidad, en el espanto que sentirán las sombras, y quisiéramos avisarles para que tuvieran tiempo de acurrucarse en los rincones. Y a veces las cruces de los postes telefónicos, sobre las azoteas, tienen algo de siniestro y uno quisiera rozarse a las paredes, como un gato o como un ladrón.

Noches en las que desearíamos que nos pasaran la mano por el lomo, y en las que súbitamente se comprende que no hay ternura comparable a la de acariciar algo que duerme.

¡Silencio! —grillo afónico que nos mete en el oído—. ¡Cantar de las canillas mal cerradas! —único grillo que le conviene a la ciudad—.

Oliverio Girondo Veinte poemas para ser leídos en el tranvía

25 noviembre 2005

Fragmentos de un Evangelio apócrifo

3. Desdichado el pobre en espíritu, porque bajo la tierra será lo que ahora es en la tierra.
4. Desdichado el que llora, porque ya tiene el hábito miserable del llanto.
5. Dichosos los que saben que el sufrimiento no es una corona de gloria.
6. No basta ser el último para ser alguna vez el primero.

7. Feliz el que no insiste en tener razón, porque nadie la tiene o todos la tienen.
8. Feliz el que perdona a los otros y el que se perdona a sí mismo.
9. Bienaventurados los mansos, porque no condescienden a la discordia.
10. Bienaventurados los que no tienen hambre de justicia, porque saben que nuestra suerte, adversa o piadosa, es obra del azar, que es inescrutable.
11. Bienaventurados los misericordiosos, porque su dicha está en el ejercicio de la misericordia y no en la esperanza de un premio.
12. Bienaventurados los de limpio corazón, porque ven a Dios.
13. Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque les importa más la justicia que su destino humano.
14. Nadie es la sal de la tierra; nadie, en algún momento de su vida, no lo es.
15. Que la luz de una lámpra se encienda, aunque ningún hombre la vea. Dios la verá.
16. No hay mandamiento que no pueda ser infringido, y también los que digo y los que los profetas dijeron.
17. El que matare por la causa de la justicia, o por la causa que él cree justa, no tiene culpa.
18. Los actos de los hombres no merecen ni el fuego ni los cielos.
19. No odies a tu enemigo, porque si lo haces, eres de algún modo su esclavo. Tu odio nunca será mejor que tu paz.
20. Si te ofendiere tu mano derecha, perdónala; eres tu cuerpo y eres tu alma y es arduo, o imposible, fijar la frontera que los divide...
24. No exageres el culto de la verdad; no hay hombre que al cabo de un día, no haya mentido con razón muchas veces.
25. No jures, porque todo juramento es un énfasis.
26. Resiste el mal, pero sin asombro y sin ira. A quien te hiriere en la mejilla derecha, puedes volverle la otra, siempre que no te mueva el temor.
27. Yo no hablo de venganzas ni de perdones; el olvido es la única venganza y el único perdón.
28. Hacer el bien a tu enemigo puede ser obra de justicia y no es arduo; amarlo, tarea de ángeles y no de hombres.
29. Hacer el bien a tu enemigo es el mejor modo de complacer tu vanidad.
30. No acumules oro en la tierra, porque el oro es padre del ocio, y éste, de la tristeza y del tedio.
31. Piensa que los otros son justos o lo serán, y si no es así, no es tuyo el error.
32. Dios es más generoso que los hombres y los medirá con otra medida.
33.
Da lo santo a los perros, echa tus perlas a los puercos; lo que importa es dar.

34. Busca por el agrado de buscar, no por el de encontrar...
39. La puerta es la que elige, no el hombre.
40. No juzgues al árbol por sus frutos ni al hombre por sus obras; pueden ser peores o mejores.
41. Nada se edifica sobre la piedra, todo sobre la arena, pero nuestro deber es edificar como si fuera piedra la arena...
47. Feliz el pobre sin amargura o el rico sin soberbia.
48. Felices los valientes, los que aceptan con ánimo parejo la derrota o las palmas.
49. Felices los que guardan en la memoria palabras de Virgilio o de Cristo, porque éstas darán luz a sus días.
50. Felices los amados y los amantes y los que pueden prescindir del amor.
51. Felices los felices.
Jorge Luis Borges Elogio de la sombra

24 noviembre 2005

Los murmullos

"Nada puede durar tanto. No existe ningún recuerdo por intenso que sea que no se apague."
Juan Rulfo Pedro Páramo

22 noviembre 2005

Toco tu boca

"Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.
Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y los ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua."
Julio Cortázar Rayuela

21 noviembre 2005

Tempo de chorar


Hei de chorar sin bágoas duro pranto
polas pombas de luz aferrolladas,
polo esprito vencido baixo a noite
da libertá prostituída.
As espadas penduran silandeiras
coma unha chuvia fría diante os ollos
e teño que chorar na sombra fuxidía
deste pútrido vento
que arromba a lealtá e pon cadeas
no corazón dos homes xenerosos.

Pois que somente os ollos me deixaron
para chorar por iles longos ríos,
hei navegar periplos, descubertas
por tempos que han de vir cheos de escumas,
por onde o día nasce,
alí onde xermola o mundo novo.
Pois que o que chora vive, iremos indo;
indo, chorando, andando,
salvaxe voz que ha de trocarse en ira,
en coitelos de berros i alboradas
para rubir ao cumio dos aldraxes.

E pois que cada tempo ten seu tempo,
iste é o tempo de chorar.
Celso Emilio Ferreiro Longa noite de pedra (1936-39)

20 noviembre 2005

Nuestros gritos

"Quiera Dios que nuestros gritos se escondan bajo las almohadas de los que no saben, de los que saben y callan, de los que no quieren saber."
Mauricio Rosencof Las cartas que no llegaron

19 noviembre 2005

Puzzle

"Sólo las piezas que se hayan juntado cobrarán un carácter legible, cobrarán un sentido: considerada aisladamente una pieza de un puzzle no quiere decir nada; es tan sólo pregunta imposible, reto opaco; pero no bien logramos conectarla con una de sus vecinas, desaparece, deja de existir como pieza: la intensa dificultad que precedió aquel acercamiento, y que la palabra puzzle -enigma- expresa tan bien en inglés, no sólo no tiene ya razón de ser, sino que parece no haberla tenido nunca, hasta tal punto se ha hecho evidencia: las dos piezas milagrosamente reunidas ya sólo son una, a su vez fuente de error, de duda, de desazón y de espera."
Georges Perec La vida instrucciones de uso

Nada más

"- Dime, ¿por qué supe, en cuanto te vi, que ya no iba a importar nada más? Sabes: me dije que en ese mismo momento tenía que decidirme. Que si tú pasabas de largo, perdería toda mi vida."
Carlos Fuentes La muerte de Artemio Cruz

Ese pozo que son las letras

"Caíste en ese pozo que son las letras y te sentiste cada vez más solo y melancólico. Y te fuiste declamando, a través de puertas irreales, e investigando sobre cosas de las que muchos ignoraban su existencia. Así, en tus meditaciones, saltabas a medianoche de la cama y con grandes gestos mudos te desplegabas por los aleros altísimos, por sobre las tejas más cercanas al vacío"
Reinaldo Arenas El mundo alucinante

24 octubre 2005

Corazón tan blanco

"Escuchar es lo más peligroso, es saber, es estar enterado y estar al tanto, los oídos carecen de párpados que puedan cerrarse instintivamente a lo pronunciado, no pueden guardarse de lo que se presiente que va a escucharse, siempre es demasiado tarde. [...]
Nada es bastante cuando se espera, algo debe rasgarse con el filo afilado o algo debe quemarse con la brasa o la llama, nada es bastante tras la desestimación y la abjuración y el desdén, después sólo puede admitirse el siguiente y consecuente paso, la supresión, la cancelación, la muerte de quien fue expulsado del territorio que delimita la almohada."
Javier Marías Corazón tan blanco

27 marzo 2005

Manifiesto infrarrealista

"Que la amnesia nunca nos bese en la boca. Que nunca nos bese. Soñábamos con utopía y nos despertamos gritando."
Roberto Bolaño "Manifiesto Infrarrealista"

Desasosiego

"Sobre todos caerá la noche y arribará la diligencia. Disfruto de la brisa que me dan y del alma que me dieron para ello, y no pregunto más ni busco. Si cuanto dejé escrito en el libro de los viajeros, puede, releído un día por otros, entretenerlos también en la travesía, estará bien. Si no lo leyeran o no los entretuviera, estará bien de todos modos."
Fernando Pessoa El libro del desasosiego.

26 marzo 2005

Estas páginas quieren ser un homenaje a aquellos textos, imágenes y sonidos que de un modo u otro forman parte de mi vida.

Aquí podrán encontrar a Jorge Luis Borges, Roberto Bolaño, Juan Rulfo, Oliverio Girondo, Julio Cortázar, Roland Barthes, Silvina Ocampo, Manuel Antonio, Alejandra Pizarnik, Juan Carlos Onetti, Domingo Faustino Sarmiento, Olga Orozco, Suso de Toro, Joaquín Sabina, Rodrigo Rey Rosa, Idea Vilariño, Lucio V. Mansilla, Manuel Rivas, Adolfo Bioy Casáres, Rosalía de Castro, Andrés Rivera, Mario Delgado Aparaín, Martín Kohan, Joan Manuel Serrat, Mauricio Rosencof, Paul Eluard, Manolo García, Carlos Gamerro, Manuel Curros Enríquez, James Joyce, Ismael Serrano, Federico García Lorca, Luis Cernuda, Julian Barnes, Carlos Casares, Lope de Vega, Fabián Casas, Enrique Vila-Matas, Julia Kristeva, Charly García, Fernando Pessoa, Reinaldo Arenas, Xurxo Borrazás, Virgilio Piñera, Mario Santiago Papasquiaro, María Mariño, Benjamin Peret, Juan Bautista Alberdi, William Shakespeare, Ángel Rama, Antonio Machado, Tibulo, Efraín Huerta, Juan Ramírez Ruiz, Nelson Ferrer, Walter Benjamin, San Juan de la Cruz, Pablo Picasso, Alfonso Rodríguez Castelao, Gabriel García Márquez, Beatriz Sarlo, Susana Thénon, Roque Dalton, Rodrigo Lira, Mario de Sá-Carneiro, Pablo Neruda, Rodolfo Wilcock, Violeta Parra, Pola Oloixarac, Celso Emilio Ferreiro, José Emilio Pacheco, Alejandro Dolina, Roberto Arlt, César Aira, Fernando Vallejo, Fogwill, Xosé Luis Méndez Ferrín, Ricardo Piglia, Javier Marías, Carlos Fuentes, Francisco de Quevedo, Arthur Rimbaud, Moira Yrigoyen, Pedro Lemebel, Georges Perec, Julia Kristeva, Cesare Pavese, Francisco Fernández Naval, Lalo Mir, Garcilaso de la Vega, Apolodoro, María Carman, Mendiño.

Gracias por acompañarme en este viaje.


[Los derechos sobre los textos, imágenes y sonidos pertenecen en todos los casos a sus autores, editores o herederos. Aquí se comunican con fines educativos, informativos y de difusión artística.]